Descubre por qué no puedes pronunciar el nombre de este país

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Por qué Macedonia es el país innombrable

Este país anteriormente conocido como República de Macedonia, Antigua República Yugoslava de Macedonia, o incluso “FYROM” (Former Yugoslavian Republic Of Macedonia) ha vivido una auténtica pesadilla debido a su denominación. Y sí, aunque parezca mentira, esto afecta al día a día de sus ciudadanos. Aunque actualmente la forma acordada es Macedonia del Norte, desde su independencia en 1991 hasta 2019 todos debatían cómo denominarlo.

Macedonia, con este nombre, era una de las repúblicas que constituían Yugoslavia. Cuando se desintegró este país, accedió a su independencia conservando este mismo nombre. Gran parte de los macedonios han nacido, crecido y vivido bajo esta denominación, y sienten propio este nombre.

Paisaje cercano a Kumanovo

 

¿Por qué es controvertido?

El problema llega por sus vecinos, principalmente por parte de Grecia. Históricamente, Macedonia ha sido y es una región griega, la comprendida entre en curso bajo del Río Vardar y Tesalónica (siendo esta la capital). De hecho, actualmente esta región griega se llama “Macedonia central”. La histórica región de Macedonia, de la cual nacieron hombres y leyendas como Alejandro Magno, estaba situada prácticamente en su totalidad en territorio griego, y solo una pequeña porción (al sur, cerca de Heraclea, en Bitola) en la “República de Macedonia”, más al norte, y de cultura predominantemente eslava.

Desde la perspectiva griega, se asiste a un “robo” de la historia de su país, y a un fraude, pues la denominada “República de Macedonia” no se sitúa en los límites donde la verdadera o histórica Macedonia se encontraba. Además, existen recelos por parte del gobierno griego de fomentar un nacionalismo macedonio que intente aglutinar bajo la Gran Macedonia tanto a la República de Macedonia como a la región de Macedonia Central. De hecho, tradicionalmente ha habido tensiones entre Macedonia Central (Tesalónica, la segunda ciudad del país) y el resto de Grecia.

Estatua del “guerrero a caballo” en Skopje

 

En la República de Macedonia, con un lenguaje eslavo emparentado con el búlgaro, y más lejanamente con el ruso, se consideran descendientes de los macedonios antiguos. La adopción de su bandera nacional fue objeto de veto por parte del gobierno griego, y hubo que cambiarla. En primer momento se escogió el sol de Vergina, tradicional emblema macedonio que fue visto como una usurpación. La bandera de Macedonia Central (griega) es este sol con un fondo azul, y la República de Macedonia escogió este mismo sol con un fondo rojo. Posteriormente, se modificó expandiendo el sol hasta hacerlo muy diferente, y es el aspecto que tiene hoy en día.

Banderas macedonias en Kale

 

Grecia estableció un embargo tras la independencia de la República de Macedonia que originó una gran crisis en el país, al ser Grecia su puerto más próximo. Macedonia es candidata a la Unión Europea desde 2004, pero no ha empezado ningún proceso de diálogo por el veto griego. Igual pasa con la OTAN, donde Grecia ha vetado a Macedonia hasta que se ha encontrado una solución al nombre. Se han propuesto varios nombres en estas décadas, destacando “Vardaria”, por el Río Vardar, “Macedonia-Vardar”, “Macedonia-Skopje”, pero no fructificaron ni en un lado ni en otro. Al gobierno griego que estuvo más cerca de llegar a un acuerdo le costó las elecciones, que solo querían admitir a trámite la denominación “Fyrom”, acrónimo hecho palabra. Por eso, quizá nunca vierais durante muchos años “MACEDONIA”, pero sí “FYR MACEDONIA” o “ARY MACEDONIA”.

Puerta de Macedonia en construcción

 

Y no todo acaba ahí. Macedonia está intentando construir su pasado. El aeropuerto del país solía llamarse “Alejandro Magno”, y la capital Skopje se encuentra saturada de monumentos en honor al pasado macedonio (griego) como el mismo Alejandro Magno, el rey Filipo, etc.

Esto es porque los macedonios consideran que no son eslavos 100%. Es decir, que no son nuevos pobladores invasores, sino que los auténticos macedonios se mezclaron con los eslavos que llegaron a este territorio. Por tanto, son los auténticos macedonios y tienen derecho a reconstruir su historia. Historia que por otra parte, colisiona con su vecina Bulgaria. El territorio que ocupa el país actual de Macedonia nunca ha sido independiente, y ha estado dominado por griegos, otomanos (bajo Rumelia), búlgaros y serbios. El mayor esplendor lo consiguió bajo dominación búlgara, donde la ciudad de Ohrid jugó un papel fundamental. El zar Samuel de Bulgaria residía en Ohrid, así que era macedonio, o búlgaro, según la perspectiva. En esta ciudad también crearon los Santos Cirilo y Metodio el alfabeto cirílico, que se extendió hasta Rusia.

Banderas albanesas en Glumovo

 

Mientras tanto, Macedonia vive una inestabilidad que afecta a la vida de sus ciudadanos. El país carece de una estabilidad política y social, que provoca tensiones entre los ciudadanos de origen macedonio-eslavo y la gran minoría albanesa (en torno al 25% de la población, que es mayoría en el noroeste y oeste del país). En 2001 estuvo al borde la guerra civil entre estos dos bandos, por el sentimiento de la creación de la Gran Albania. Esporádicamente se producen conflictos, como en Tetovo y Kumanovo, grandes ciudades cercanas a la frontera con Kosovo. El país carece de apoyos internacionales. La gran mayoría de la población piensa que su situación era mucho mejor dentro de Yugoslavia. La Unión Europea no es capaz de prestar ayuda por la disputa del nombre y la oposición griega, y el partido VMRO se inclinó al autoritarismo y su líder huyó a la Hungría de Orbán. La sociedad se encuentra dividida y desesperanzada de ver la pasividad de la UE ante sus problemas, un país con una elevada tasa de pobreza y de los más pobres de Europa.

Glumovo

 

Actualización (agosto 2018). Durante este año de 2018, los gobiernos macedonio y griego alcanzaron un acuerdo para resolver el nombre del país. El acuerdo de Prespa fijaba que la denominación elegida ha sido “Macedonia del Norte“. Será sometida a referéndum en Macedonia el 30 de septiembre. La sociedad a uno y otro lado de las fronteras se encuentra dividida: en Grecia se han celebrado inmensas manifestaciones en contra, y en Macedonia se intenta boicotear el referendum. Preguntándole a los macedonios, me dijeron que “ya tienen un nombre y no tienen por qué cambiarlo” y que “están seguros de que saldrá que no”. El resultado del referéndum fue de 94 % a favor, aunque declarado inválido pues solo alcanzó una participación del 37 %, por lo que el boicot existió. Pese a esto, el Parlamento macedonio votó a favor del cambio de nombre.

Cartel en Ohrid donde se lee “Nuestro nombre es Macedonia. Boicot”, con las fotografías de los primeros ministros griego y macedonio

 

Actualización 2019: habiendo Macedonia ratificado su acuerdo y cambiado, entre otros, el nombre del Aeropuerto Alejandro Magno por Aeropuerto Internacional de Skopje, en su legislación ya aparecía como Macedonia del Norte. En Grecia, el Parlamento aprobó por una estrecha mayoría este acuerdo aunque costó la ruptura del gobierno griego, que tuvo que superar una moción de confianza. Fue, desde entonces, cuando Macedonia del Norte entró en vigor. En el acuerdo se explicitó que el gentilicio macedonio era válido para Macedonia del Norte, así como la denominación de su idioma, no había necesidad imperativa de utilizar normacedonio. Días después, el acceso a la OTAN se materializaba y varios países ya han firmado su ingreso. Se espera que en los próximos meses se abran las negociaciones para el ingreso en la Unión Europea.

 

 

 

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