NORTE de KOSOVO, la controvertida región serbokosovar
El norte de Kosovo es la región donde habita la mayoría serbia, y que plantea problemas de fronteras
El norte de Kosovo es una región de mayoría serbia, que está compuesta por cuatro municipios: Leposavić, Zubin Potok, Zvečan y Mitrovica norte. Se trata de un territorio controvertido: está dentro de los límites administrativos de la antigua provincia de Kosovo, sobre la que la República de Kosovo declara su soberanía, pero en la práctica está controlado de facto por Serbia, pues no fue dominado por los albanokosovares tras la Guerra de Kosovo. Por ello, su estatus es complicado y funciona como una extensión más de Serbia, con instituciones paralelas apoyadas desde Belgrado, y a la vez, sin una autoridad central fuerte que ha propiciado una élite de políticos locales fuertes, incluyendo el crimen organizado según relatan algunos analistas.
Su continuidad geográfica con Serbia hace que el norte de Kosovo se haya considerado como una extensión más de esta, y que, para los norkosovares, Serbia nunca haya dejado de funcionar como Estado a pesar de la declaración de independencia de Kosovo que los incluía. Aunque reclamados por Kosovo, el control serbio y su población serbia han motivado que surgieran propuestas de modificaciones de fronteras. Estas suponían un intercambio de territorios: el norte de Kosovo pasaría a Serbia; y la región del Valle de Presevo, a Kosovo (el Valle de Presevo es una región serbia de mayoría albanesa, como te contaba en este artículo). Estas propuestas no han prosperado y han sido condenadas por suponer una coincidencia entre líneas étnicas y fronteras, lo que podría desatar violencia hacia las minorías e incentivar modificaciones de fronteras en un espacio tan fragmentado étnicamente como los Balcanes.
En el norte de Kosovo siguen ocasionándose tensiones entre las dos comunidades étnicas, serbia y albanesa, con esporádicos brotes de violencia. Algunos incidentes en la ciudad de Mitrovica con la muerte de personas provocaron revueltas que se extendieron por todo Kosovo; también tensiones institucionales como la llegada de trenes con gigantescas serigrafías de banderas serbias (que, aunque lleguen a una región de mayoría serbia, han de pasar un control fronterizo en el que la policía kosovar está presente). También algunas declaraciones de políticos, que incentivan el conflicto como las que alertan sobre potenciales ataques de una comunidad sobre otra. Por todo ello, se trata de una región inestable y sujeta a cambios políticos que pueden implicar tensiones en la convivencia: su estatus no está resuelto.
Actualmente, el norte de Kosovo forma parte de la Asociación de Municipios Serbios de Kosovo, una medida que se adoptó tras los diálogos de Bruselas entre Kosovo y Serbia para normalizar relaciones. En teoría, los dota de gran autonomía dentro de Kosovo, pero esta medida no está del todo aplicada. Cuando vine aquí, entre el resto de Kosovo y su parte norte no hay controles fronterizos, se puede pasar libremente. Sí hay frontera entre Serbia y el norte de Kosovo, por lo que concluyo que las autoridades albanokosovares controlan el ingreso a todo su territorio, aunque en estos municipios del norte no tienen competencia sobre el gobierno, ni ningún aspecto más. Por ejemplo, no sobre los censos, y tampoco sobre la moneda: aquí opera el dinar serbio, como en el resto de Serbia. Por todo ello, visitar el norte de Kosovo me pareció una gran aventura, ya que es una región como en un limbo, con dudas sobre la seguridad y totalmente por conocer.
1.-Kosovska Mitrovica
La ciudad de Mitrovica es el principal asentamiento del norte de Kosovo y actúa como su capital de facto. Se trata de una ciudad dividida: el río Ibar separa a los serbokosovares al norte, y los albanokosovares al sur. Una ciudad que se ha convertido en el símbolo del conflicto étnico, y que está custodiada permanentemente por la KFOR.
Te cuento más sobre Kosovska Mitrovica en este artículo
2.-Zvečan
Zvečan (Zveçan en albanés) es uno de los asentamientos más importantes de Kosovo ya que, a pesar de su escasa población (17 000 habitantes) alberga uno de los lugares más codiciados estratégicamente e importantes para su economía: las Minas de Trepča. Comprenden el complejo minero más grande de Europa, donde se extraía plomo, zinc y plata, y llegó a ser una de las actividades principales de toda Yugoslavia, empleando a más de 23 000 personas. Llegó a tener más de cuarenta minas y fábricas, aunque actualmente solo quedan abiertas siete. Sus orígenes se retraen a la época romana, y fue la presencia de estos minerales tan preciados lo que motivó el asentamiento de Municipium Dardanorum, que fue capital de la provincia romana de Dardania. Con las sucesivas invasiones, las minas redujeron su actividad hasta que en el siglo XIII el rey serbio, que había conquistado estos terrenos, contrató a mineros alemanes de la Sajonia, que la explotaron y se asentaron en la ciudad dejando su impronta cultural. Fue entonces cuando Zvecan surge como ciudad, que llegaba a tener privilegios e incluso cónsules de ciudades comerciantes como Ragusa, Split o Kotor.
Tras la Batalla de Kosovo de 1389, el Imperio otomano se expandía por todo este territorio, que formalmente fue conqusitado en 1455. Durante la época otomana, la actividad decreció y prácticamente se abandonaron. No sería hasta el fin de la I Guerra Mundial y el dominio serbio cuando las minas comenzaron a resurgir, convirtiéndose en la actividad principal de todo Kosovo. En 1989, ante el ultranacionalismo de Milosevic y la supresión de la autonomía kosovar, se organizaron unas huelgas masivas que paralizaron la actividad minera. En esta etapa de tensión se deterioraron las minas, que sufrieron robos, desvalijos y, en definitiva, un colapso que significó una enorme contaminación ambiental, en la que los niveles de plomo en el aire sobrepasaban cien veces los niveles considerados máximos por la UE. La situación no mejoró durante la Guerra de Kosovo, cuando fueron escenario de enfrentamientos entre serbios y albaneses por su control, incluyendo sabotajes en las redes eléctrica e hidráulica. Actualmente siguen siendo objeto de controversia entre las administraciones serbia y kosovar, ya que los últimos pretenden nacionalizarla.
Zvecan es un pueblo que vive de las minas y que hoy en día parece casi abandonado. Está protegido por su fortaleza, en una imponente elevación que es un antiguo volcán ya extinto. La fortaleza se comenzó a construir en el siglo XI, como una posición estratégica fronteriza que constituía una avanzadilla del poder serbio frente a los dominios bizantinos, y que permitió la conquista de los territorios del sur, todo Kosovo. Este asentamiento era el que protegía las minas de Trepca, y también la ciudad que se fue desarrollando al sur, Kosovska Mitrovica. En realidad, la separación entre Zvecan y Kosovska Mitrovica es muy tenue, ya que están muy cerca y prácticamente son un continuo urbano, solo separadas entre sí por la presencia de la enorme colina volcánica.
Cerca de Zvecan puedes visitar el Monasterio Banjska, que fue una grata sorpresa encontrar. Su monasterio e iglesia de San Esteban fue construido en el 1317, bajo el reinado del rey serbio Milutin, para ser el mausoleo de este rey. Fue su primer descanso, puesto que cuando los otomanos comenzaron a conquistar este área, fue llevado primero a las minas de Trepca, y de ahí a Sofía, donde se encuentra actualmente. El monasterio fue abandonado y después arrasado por las órdenes del sultán otomano. Después fue transformado en una mezquita y, tras la I Guerra Mundial, comenzó a reconstruirse en su estado original, que se reestableció en 2004. El lugar me gustó mucho, quizá por lo inesperado, y me pareció un lugar apartado, desconocido, oculto entre las montañas, tras una carretera serpenteante que se perdía en una región invisible para el mundo. Me recordó mucho a los que había visitado en Serbia, como el de Gradac. Otro monasterio cercano a Zvecan es el Monasterio Sokolica, de finales de siglo XIV, aunque este no fui a verlo.
3.-Leposavić
Leposavić es el municipio más al norte de todos, y que comparte la frontera con el resto de Serbia, aquí viven algo menos de 20 000 personas. Leposavic fue parte de Kosovo solo desde 1959, cuando administrativamente se le incorporó a la provincia. En Leposavic, como en el resto del norte de Kosovo, la economía está muy deteriorada y con una tasa de paro muy elevada. El punto más bonito que ver aquí es la iglesia de San Basilio de Ostrog, que se construyó en el 2000 en una arquitectura tradicional serbia, con el armazón de sus campanarios en vigas que recuerdan a un esqueleto.
4.-Zubin Potok
El municipio de Zubin Potok tiene una población de unos 15 000 habitantes y es el más agrícola del norte de Kosovo. La importancia de Zubin Potok reside en que aquí se encuentra el mayor embalse del país, que alberga la principal central hidroeléctrica de Kosovo. Así, el lago Gazivoda es el más grande de Kosovo, con casi 12 km2, formado en la cabecera del río Ibar, que en su parte más oeste también pertenece a la propia Serbia. Este embalse fue construido en 1978 para proveer de energía eléctrica a Kosovo y es objeto de disputa, pues representa el principal suministro eléctrico del país. Actualmente está controlado por los serbokosovares del norte, aunque se pretende una gestión conjunta. Durante el mandato de Donald Trump, fue renombrado como Lago Trump, ya que materializó un acuerdo comercial entre los presidentes serbio y kosovar (el cual aunque fue vendido como un gran logro, tuvo escasa significancia).
¿Conocías esta región?